Larry Page, el cofundador de Google dijo: “si estuviésemos motivados por el dinero, hubiésemos vendido Google y estaríamos en la playa”.
Es decir, en realidad el Gigante tecnológico Google no necesariamente se mantiene por dinero; sino que este es una consecuencia de ofrecer un buen servicio.
Ahora bien, ¿es dinero lo que Google busca de nosotros? ¿Es necesario pagar a fuerzas para estar en los primeros lugares de búsqueda?
La respuesta es no, de hecho las páginas que más reciben visitantes no necesariamente pagaron para eso; ya que hay dos tipos de posicionamiento en Google, el orgánico y el pago.
Inicio de Google
Si tuviste que hacer tareas en los años 90 e incluso a principios de los 2000, seguramente, usabas otros buscadores como Altavista, Yahoo, Lycos, y Excite; donde era muy común realizar la misma búsqueda en cada uno de estos motores, para ver en cualquier encontrabas información valiosa.
Dando vueltas y vueltas en muchas páginas, sumado al internet tan lento que había en esa época; de esta manera, buscar una información tomaba mucho tiempo, ya que estos buscadores eran fáciles de engañar.
Desde los años 90, las personas que hacían páginas webs notaron la importancia de aparecer en las primeras posiciones dentro de los motores de búsqueda.
Por ejemplo, si alguien tenía una página de automóviles en Monterrey; utilizaba muchas veces esa palabra clave, es decir, “comprar automóviles en Monterrey” o “comprar vehículos en Monterrey”.
Una estrategia de SEO local, que aunque la página no ofreciera información valiosa y sólo repitiera muchas veces la palabra clave; lograba engañar a diferentes buscadores como Lycon, Altavista y Excite.
Por ello, cuando los usuarios entraban en esa página se topaban con una experiencia poco útil, donde no hallaban información valiosa sobre cómo encontrar vehículos en dicha ciudad.
Esas páginas no estaban diseñadas para ofrecer una buena experiencia de búsqueda; sólo para indexarse en las primeras posiciones, lo que generaba frustración y descontento en los usuarios.
Ahora bien, todo cambia con la revolución de Google, pues este había modificado por completo la forma en que se desplegaba la información.
Todo cambio en 1998, y específicamente a inicios de los 2000 donde fue aumentando su popularidad.
Google en conjunto con sus fundadores les hizo la vida más sencilla a los usuarios.
Su algoritmo no era tan fácil de engañar por las personas que realizaban páginas webs, quienes se dedicaban a atiborrar palabras y frases claves.
Page Ranks
Pues Google tenía otra forma de valorar las páginas webs que se encontraban en los primeros lugares; también se dedicaba a penalizar o quitar otras páginas de las búsquedas.
A grandes rasgos, todo se basa en Page Ranks, una serie de algoritmos desarrollados por Google para optimizar las búsquedas, asociado en parte con el SEO local.
Por ejemplo, imagina que tú escribiste un libro de química, llamado “química para mejorar el agua de las peceras para peces del caribe”; otra persona escribió un texto denominado “química para mejorar el agua de peceras para peces del pacifico”.
Digamos, que esta segunda persona leyó tu libro antes, y le fue tan valioso que decidió citarlo.
Ahora bien, como tu texto ha sido relevante para otros libros, se le da mayor importancia. Lo mismo ocurre con las páginas webs en Google.
Es decir, si tienes una página web que otros sitios han considerado valiosa, y han puesto enlaces que redirigen a tu página; tu espacio web será visto por Google con mayor valor, ubicándolo en las primeras posiciones de búsqueda; pues piensa que le dará una buena información y experiencia a los usuarios que la consultan.
Esto maravillo a los usuarios, quienes fueron migrando por completo a dicho motor de búsqueda; pues en lugar de utilizar todos los buscadores y visitar un sinfín de páginas, las personas empezaron a consultar únicamente Google; y fue así como los usuarios y consumidores marcaron la pauta del mercado.
Tiempo e interacción
A su vez, poco a poco Google se fue humanizando más, si bien sigue siendo relevante que otras páginas hablen de tu sitio web, estrategia que se conoce como back lists o enlaces entrantes.
Actualmente, este motor de búsqueda le está dando más peso al tiempo que pasa el usuario en el sitio web, y como interactúa con él.
Por ejemplo, si un usuario ingresa a Google y busca información, bajo la frase “mueblerías en mi ciudad”, luego, ingresa a tu página web pero se queda muy poco tiempo, Google determinará que la información que le suministro ese sitio web no es relevante, por ello, a la próxima penalizará la página.
Esta penalización no significa que va a sacar a tu sitio web de su base de datos, sino que cuando un usuario escriba mueblerías en dicha ciudad, se mostraran otras páginas antes que la tuya, a fines de determinar si los usuarios pasaran más tiempo en estos otros sitios webs.
De igual forma, se considera la interacción del usuario con la página, por ejemplo, si posees información relevante que se pueda compartir entre amigos, o en redes sociales, Google la verá con buenos ojos, por ende, la seguirá desplegando.
¿Qué es lo que quiere Google de nuestra empresa en la web?
Google lo que busca es que le brindes un excelente servicio informativo a los usuarios, pues esto garantiza que las personas sigan utilizando la plataforma para buscar información. En el momento en que Google deje de ser una buena herramienta, los consumidores procederán a buscar otra que si satisfaga sus necesidades.
Tal y como paso a finales de los 90, con otros buscadores como Altavista, y Yahoo, por ello, Google no se enfoca en la producción de dinero, pues su columna vertebral se basa en brindar información relevante para el usuario, por ende, valora el tiempo y la interacción de los internautas con el sitio web.
Posicionamiento orgánico vs Google ADS
Existe una gran diferencia entre el posicionamiento orgánico (SEO local), y el Google ADS o también conocido como Google Anuncios, en principio, al realizar una búsqueda como mueblería en mi ciudad, aparecerán un par de negocios, quienes no han pagado para mostrarse en la búsqueda, y sólo son empresas registradas en Google My Business.
Por otra parte, si el usuario da clic en “más lugares” se despliegan más negocios, quienes son anuncios y están marcados como tal, en otras palabras, estas empresas le pagan a Google para aparecer allí, mencionando que los montos pueden ir desde un par de centavos, hasta 30 y 40$ dólares.
Dependiendo de cuantas personas se quieran anunciar con esas palabras claves, es decir, SEO local, pues no es lo mismo anunciar mueblerías, automóviles, o servicios de dentistas y abogados.
Por ejemplo, para un abogado cada cliente representa miles de dólares, en cambio, en un restaurante cada cliente representa decenas o cientos de dólares, dependiendo de la recurrencia del cliente, en otras palabras, del valor de vida del cliente, mientras mayor sea este último elemento, tiende a subir el precio de los anuncios.